ABORDAJE
Quiso trocarse en llanto la
alegría
y en olvido tus dulces
filigranas,
equivocando el rumbo de
mañanas
secretas en mi azul epifanía.
El ritmo se durmió, por
carestía,
sobre un barco sin velas ni
mesanas,
naufragio recubierto con las
ganas
de volver a sentir tu mar, tan mía.
Por tu vena de fuego,
escalo hasta rozar el
abordaje,
imposible al desgarro que
sublimo.
Sinceramente alego,
entre el óxido fiel a nuestro
anclaje,
que abrazada a tus olas me
redimo.
Preciosos tus versos amiga.
ResponderEliminarUn gran abrazo!!!
Muchas gracias, Fabi. Eres un encanto, amiga
ResponderEliminarUIn abrazo enorme.
Pilar